ANDREA FREDIANI
El Imperio Romano está cambiando. Los bárbaros, cada vez más cerca de las fronteras, se han convertido en un peligro, pero también son los nuevos reclutas que engrosan las filas del ejército imperial. El cristianismo está venciendo todos los obstáculos, incluso las persecuciones más sangrientas. Cuando Diocleciano deja el trono, se desatan feroces luchas por la sucesión. Entre los aspirantes, se encuentra Constantino, que pretende por todos los medios obtener el poder. Su irresistible ascenso se cruza con la historia de una mujer frágil e ingenua, fuertemente apasionada, Minervina, y con la de Sexto Martiniano, un pretoriano decidido a defender los valores de una sociedad y una tradición que se están desmoronando. Entre ambos nacerá una historia de amor intensa, épica y atormentada como la época en la que viven: el tránsito de la Roma antigua a la medieval, entre las deidades tradicionales y el Dios de los cristianos.