«Calla, que de ti no quiero ni que me cierres los ojos.» Con esta sentencia disparada contra su mujer, el octogenario José Molina rompe en su lecho de muerte un silencio al que se ha aferrado durante décadas. Esta frase se insta
Artículos relacionados
Vista previa: LO QUE A NADIE LE IMPORTA
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios mediante el análisis de sus hábitos de navegación. Puede obtener más información aquí o cambiar la configuración.