CONTRERAS GARCÍA, JOAQUÍN
La Chiclana de esa época presentaba una economía eminentemente agraria y grandes diferencias sociales. El señorito que dominaba y controlaba el pueblo y las clases trabajadoras que se repartían entre la salina y el viñedo. En medio se había ido perfilando una clase pequeño-propietaria de tierras y viñas, los mayetos, relativamente abundante con respecto a la población total. en este contexto emerge la figura del padre Salado, activista social pero a la postre cura, que alentaba al pequeño viticultor a reivindicar sus derechos en defensa de una mejora de su calidad de vida, lo cual representaba una amenzaza para los beneficiarios del caciquismo en la localidad. Lo que explica la persicución que sufrió.